Conde Duque
Situado alrededor del antiguo cuartel que le da nombre, sus calles estrechas y plazas esconden tabernas de toda la vida y tiendas con sello personal.
Surgido alrededor del antiguo cuartel que le da nombre, Conde Duque es un barrio alegre, bohemio y desenfadado, con un comercio emergente y moderno pero con aire vintage. Su aparente tranquilidad y sosiego contrastan con el bullicio y la ferviente actividad de la Gran Vía, la recién renovada Plaza de España y la calle Princesa, que marcan sus límites hacia el sur.
El nombre real del monumental edificio de Conde Duque, que imprime personalidad a toda la zona, es el de Real Cuartel de Guardias de Corps, cuerpo de élite que estaba dedicado a la custodia de los monarcas. Su construcción comenzó en 1717 por mandato de Felipe V, primer rey Borbón, quien encargó su diseño al gran arquitecto madrileño Pedro de Ribera. De sus más de 200 metros de fachada destaca especialmente su portada de estilo churrigueresco labrada en piedra y situada frente a la plaza de Guardias de Corps.
Actualmente el cuartel del Conde Duque es uno de los grandes centros de expresión cultural de la ciudad junto con Matadero y CentroCentro. Tras su rehabilitación, finalizada en 2011, da cabida a los Archivos de la Villa, la Hemeroteca Municipal, la Biblioteca Histórica Municipal, el Museo de Arte Contemporáneo que exhibe el despacho de Ramón Gómez de la Serna y la Biblioteca Musical Víctor Espinós creado para la difusión y fomento de la educación musical. Todo ello junto con salas de exposición, un auditorio y varios espacios escénicos.
Paseando por estas áreas de Madrid te toparás con muchas iglesias históricas, palacios, galerías de arte y hasta con un Museo de dibujo e ilustración.
Este espectacular edificio fue construido en 1773 con diseño, entre otros, del arquitecto Ventura Rodríguez. Es la residencia de la Casa de Alba en Madrid, una de las grandes familias de la nobleza española, y sede de su fundación. Alberga una de las colecciones de arte privadas más destacadas, con obras significativas como el Retrato del Gran duque de Alba, de Tiziano, y el de La XIII duquesa de Alba, de Goya. El espacio ofrece un servicio de visitas guiadas que incluyen, por primera vez, la entrada a una de las estancias más singulares y atractivas de esta residencia, la Biblioteca, hasta ahora accesible sólo a estudiosos e investigadores.
Museo ABC de dibujo e ilustración (actualmente cerrado por remodelación)
Lo que fue una fábrica de cerveza es hoy un espacio cultural con una fachada en metal y vidrio, casi tan llamativa como las obras de ilustración y la colección de dibujos originales publicados en el periódico ABC y la revista Blanco y Negro. Todos llevan la firma de grandes artistas de cada una de las épocas que han vivido ambas publicaciones.
Este monasterio de religiosas de la Orden Militar de Santiago fue fundado por Felipe IV en 1650. En él, lo más destacable es la iglesia con planta de cruz griega con extremidades en semicírculo y, en el centro, una hermosa cúpula sobre pechinas y pilares achaflanados.
Fue construido en el siglo XVIII para residencia de los marqueses de Guadalcázar y adquirido a finales del XIX por la familia de banqueros Bauer. Fue el centro neurálgico de la vida musical de la ciudad durante el primer cuarto del siglo XX. En la actualidad es sede de la Escuela Superior de Canto de Madrid.
Iglesia de Nuestra Señora de Montserrat
La iglesia de Montserrat fue creada por monjes benedictinos castellanos expulsados del monasterio de Montserrat, en Barcelona, en 1640. El diseño fue realizado por Sebastián Herrera Barnuevo, aunque tras su fallecimiento, otros arquitectos se hicieron cargo de él.
Es considerada una de las mejores obras de Ventura Rodríguez, quien recibió sepultura en él junto a su esposa hasta su traslado en el siglo XIX a la capilla de los arquitectos en la parroquia de San Sebastián. Su aspecto exterior no hace justicia con su riqueza interior, donde destaca su gran órgano, realizado en madera de nogal con numerosos detalles ornamentales.
Conde Duque es también uno de los barrios de Madrid donde se concentra un buen número de galerías de arte. Blanca Berlín Galería o Twin Gallery son algunas de las galerías de renombre que tienen aquí su sede.
Fundación Casa de México en España
Un palacete de primeros del siglo XX acoge este centro que sirve de puente de intercambio cultural y de conocimiento entre México y España. Forma parte de la Embajada de México y cuenta con la librería del Fondo de Cultura Económica “Martín Luis Guzmán”, un auditorio, una tienda especializada en arte popular y salas de exposiciones. El espacio también cuenta con el restaurante Puntarena que propone una reinterpretación auténtica de la comida costeña, con las mejores recetas mexicanas y platos que resaltan la frescura y el sabor de la comida del mar.
Si tienes pensado hacer una ruta de compras por el barrio de Conde Duque no busques grandes superficies, cadenas o franquicias. Una de las características de los comercios de la zona es su apuesta por las tiendas de autor. Pequeños establecimientos con una decoración y ambiente especial lo que los dota de personalidad propia.
Pasear por estas calles es una muy buena idea, si quieres llevarte algún recuerdo gastronómico; La Quesería Cultivo o Panic son dos paradas imprescindibles de este paseo.
La moda es uno de los referentes de la zona, que da cabida a diseñadores y marcas difíciles de encontrar en las corrientes mainstream. Conde Duque es un barrio en el que lo clásico y lo moderno parece difícil de separar, donde tan pronto podemos hacernos con una prenda del setentero estilo británico mod como con la última tendencia de deportivas de línea exclusiva.
Junto con esta oferta de moda alternativa podemos encontrar otros negocios llamativos y muy especiales, como tiendas en las que adquirir joyas musicales en formato de vinilo, jugueterías diferentes o librerías con rarezas y ediciones exclusivas, así como locales donde se realizan artesanalmente bolsos y otros complementos o donde se recuperan guitarras o bicicletas de segunda mano.
Cabe destacar la nueva tienda de la firma de moda española Zara localizada en los bajos del edificio España, en el que se encuentra el Hotel Riu Plaza de España. Un local de más de 7700 m2 de superficie construida y 3815 m2 de superficie comercial que se divide en cuatro plantas.
En el barrio de Conde Duque podemos disfrutar de una ruta de tapeo tan deliciosa como heterogénea. Sus estrechas callejuelas, a la sombra de los rascacielos de la Gran Vía y la Plaza de España, dan lugar a coquetas y aparentemente escondidas placitas donde las terrazas se convierten en las grandes protagonistas. Como es el caso de la Plaza de las Comendadoras, la de Guardias de Corps o la de Cristino Martos.
Esta zona conserva gran número de tabernas castizas, las de toda la vida, donde disfrutar de una refrescante caña de cerveza o el vermú de barril acompañados de una tapa típica como boquerones en vinagre, croquetas u olivas. El tapeo en Conde Duque es toda una religión y además de estos locales con sabor tradicional como La Tabernilla del Gato Amadeus, la Taberna de El Limón o Bodegas El Maño se pueden encontrar otros con un aire más moderno donde se reinterpretan las clásicas recetas madrileñas con un toque vanguardista, productos orgánicos o cocinas exóticas. Entre ellos, destacamos Federal Café o Arquibar.
Localizado en el número 13 de Santa Cruz de Marcenado (planta baja de la Casa de Canarias) se encuentra el bar-restaurante canario Detenderete con una carta repleta de platos típicos de la gastronomía canaria.
Los cafés son otros de los grandes protagonistas de Conde Duque. Locales acogedores con una decoración especial que va desde la sobriedad del diseño escandinavo hasta otros con aire retro, como El Jardín Secreto o Mur Café, donde disfrutar de una sosegada taza de café acompañada de pasteles y tartas caseras. Otra buena opción es visitar la pastelería Sweet Studio, que cuenta con un toque internacional incluyendo especialidades japonesas y francesas.
Este barrio es un área muy a tener en cuenta si te gusta trasnochar. Aquí puedes escuchar música en vivo y también bailar hasta altas horas de la madrugada.
Café La Palma, Tempo Audiophile Club, Sala Siroco, Moloko Sound Club y 14 Rock Bar son las salas de conciertos y de baile características del barrio que no deben faltar en tu ruta por al caer la noche.
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