Esta tienda, fundada por Toribio Hernanz, lleva más de un siglo especializada en cordelería y redes, y, por supuesto, la fabricación de alpargatas, por lo que es más conocida. Este calzado ha dejado ser símbolo del trabajo en el campo o la fábrica para pasar al uso cotidiano. Incluso cosiguió meterse en el mundo de la moda en la década de 1960 de la mano de Yves Saint Laurent, que las llevó a las pasarelas de medio mundo, pasando a ser los zapatos que usaban personajes tan conocidos como Jacqueline Kennedy o Marilyn Monroe.

Como consecuencia, Casa Hernanz llena a diario su tienda con centenares de clientes, vendiendo unos 100 000 pares al año. Sus alpargatas cosidas a mano se presentan en múltiples modelos, una treintena de colores y en todos los tamaños de pie, a precios más que asequibles. Entre sus clientes también se encuentran productoras cinematográficas, habiendo aparecido su calzado en la película Gladiator o en la serie española Palmeras en la Nieve, entre otras.