Inaugurada en 1962, esta emblemática sala de cine del barrio de Chamberí, la segunda más grande de la ciudad, fue renovada completamente tras su cierre en 2017. Ahora forma parte del modelo Luxury que oferta la cadena de cines Yelmo, actual propietaria del espacio, que consiste en una fusión de cine y gastronomía. En su programación se incluyen algunas sesiones en VOSE.

La sala dispone de amplias butacas completamente reclinables, para poder tumbarse y relajarse mientras se ve la película. El espacio entre las filas es mayor que en otras salas, y entre las butacas se sitúa una mesa con una pequeña lámpara para facilitar la visibilidad hasta el comienzo de la película. También cuenta con  un botón de llamada a los camareros en cada butaca y una mesa plegable. Comenzada la proyección, la sala queda a oscuras y los camareros ofrecen el servicio directo a butaca durante los primeros 15 minutos, aunque el bar, situado en el lobby, permanecerá abierto todo el tiempo.

Mientras se disfruta de la película se puede saborear alguno de los platos de su carta, como mini hamburguesas, crêpes o tablas de ibéricos o tomarse una copa.