Madrid en 48 horas
En Madrid podrás encontrar excelentes colecciones de arte, animadas zonas de compras, gastronomía nacional e internacional y una palpitante vida callejera. Un par de días no es tiempo suficiente para conocer la ciudad, pero aquí van algunas sugerencias para hacerse una idea general.
Del Paseo del Arte al Madrid de los Austrias
Madrid es un destino excepcional para los amantes del arte. En torno al Paseo del Prado se encuentran tres de las pinacotecas más prestigiosas del mundo, un espacio conocido también como Paisaje de la Luz, fue declarado en 2021 con el Patrimonio Mundial de la UNESCO.
El Museo del Prado conserva una completa colección de pintura española desde la Edad Media hasta el siglo XIX, además de contar con una buena representación de las escuelas italiana y flamenca. Imprescindible: ver Las meninas de Velázquez, Los fusilamientos del 3 de mayo de Goya, El jardín de las Delicias del Bosco o La bacanal de Tiziano.
El Museo Thyssen-Bornemisza recorre la historia del arte occidental desde el siglo XIII hasta finales del XX. En sus fondos hay pinturas de Caravaggio, Van Gogh o Rothko, entre otros. Y el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía cuenta la historia del arte español y europeo desde las vanguardias históricas hasta la actualidad, tomando como eje el Guernica, una de las obras maestras de Picasso. Medio día o incluso un día entero son recomendables para conocer en profundidad uno de estos museos.
Muy próximos se encuentran el Jardín Botánico y el Parque de El Retiro, donde puedes continuar la jornada con un agradable paseo. Para acercarte al viejo Madrid sube por la calle de las Huertas, que atraviesa el Barrio de Las Letras, repleto de tiendas de antigüedades, bares de tapas y cafeterías con encanto. Más adelante, se encuentra la Plaza Mayor, epicentro del Madrid de los Austrias. Desde aquí puedes llegar en diez minutos a la Plaza de la Villa, donde se ubica el antiguo Ayuntamiento, y a la Plaza de Oriente, con dos de los edificios más emblemáticos de la ciudad: el Palacio Real y el Teatro Real. En esta parte de la ciudad, las vistas de la sierra de Guadarrama son espectaculares, desde el Mirador de la Cornisa del Palacio Real se pueden disfrutar de unas preciosas vistas de los Jardines del Campo del Moro y de la Casa de Campo. A poca distancia es fácil desplazarse hasta el Templo de Debod, templo de origen egipcio desde cuyos jardines se pueden observar hermosas puestas de sol.
Tapas y cocina de autor
Además del Barrio de Las Letras, otra zona idónea para ir de tapas es La Latina. Muy cerca de aquí, el Mercado de San Miguel aloja numerosos puestos de delicatessen y bares de raciones. En los alrededores, mesones centenarios que sirven platos típicos madrileños, como el cocido, y otros embajadores del resto de gastronomías del país: gallegos, asturianos, vascos...
La comida internacional está presente en la zona de Plaza de España y los restaurantes más sofisticados en el entorno de la Gran Vía y del Paseo de la Castellana.
Las compras más especiales
Firmas internacionales, comercios de toda la vida, tiendas especializadas, propuestas innovadoras y jóvenes diseñadores conviven en las calles de la ciudad. En el barrio de Salamanca, especialmente a lo largo de las calles de Serrano y Ortega y Gasset, se sitúan las marcas de lujo. Al otro lado del Paseo de Recoletos, en el entorno de la calle de Almirante, están algunas de las tiendas con más estilo y personalidad. Y junto a la Gran Vía, donde se ubican los grandes almacenes, la calle de Fuencarral muestra en sus escaparates la moda más joven.
Salas de teatro y oferta cultural
La ciudad dispone de una amplia oferta teatral acogiendo todo tipo de espectáculos representados en grandes espacios como el Teatro Real, el Teatro Circo Price o el Teatro Español, entre otros. Madrid puede definirse como la gran capital de los musicales en español.
Abierto 24 horas
Madrid es conocida en todo el mundo por su vida nocturna: teatros, musicales, tablaos flamencos, bares de copas y discotecas en las que bailar hasta el día siguiente.
Además, algunos hoteles del centro han convertido sus azoteas en sofisticados chill-out con vistas sobre la ciudad y han aparecido nuevas coctelerías en las que disfrutar de un combinado. Seguramente sea ésta una de las mejores ideas para despedir unos días en Madrid. Pero Madrid es mucho más y siempre habrá una excusa para volver.