Las creaciones mediterráneas con toques exóticos y frescos del chef Miguel Martín se sirven con vistas a la Plaza de Colón, desde este restaurante situado en la séptima planta del remodelado hotel Gran Meliá Fénix.

Este comedor exclusivo, con aforo para 22 comensales, cuenta con una terraza con capacidad para 18 personas, con vistas sobre la Biblioteca Nacional y el Paseo de Recoletos. En él se han cuidado todos los detalles, desde la vajilla, especial para cada plato, así como la decoración estilo inglés.

La carta de Aduana celebra el encuentro entre América y España desde el punto de vista gastronómico, con productos frescos de temporada, donde destacan las ostras Rockefeller, el caviar de Riofrío con blinis ruso, la oriental lubina salvaje al vapor de verduras, jengibre y arroz con leche de coco, la causa limeña de atún rojo o el tiradito de salmón noruego con mango en ceviche, sin olvidar platos españoles como el txangurro a la donostiarra, el panaché de verduras y queso de Idiazabal y la pluma ibérica lacada y con delicias de verbena.