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Ruta de San Isidro

Nos encanta Madrid en San Isidro y queremos que vivas estas fiestas como un madrileño más. Presta atención, porque te vamos a contar dónde se celebran, cuáles son sus trajes típicos, cómo son sus dulces tradicionales y qué lugares están relacionados con la vida de nuestro Santo más querido. ¡Síguenos!

Si quieres hacerte una idea de cómo se celebraba San Isidro antiguamente, solo tienes que visitar el Museo del Prado y admirar La Pradera de San Isidro, el cuadro de Francisco de Goya pintado en 1788. Observarás cómo era la celebración hace más de dos siglos, con un Madrid un poco diferente de fondo y trajes de la época (trajes goyescos), pero poca diferencia más. Años después, seguimos disfrutando como entonces.

Casi todo lo que se sabe de la vida del Santo se lo debemos al Códice de San Isidro, un manuscrito del siglo XIII donde se narran algunos episodios de su vida y milagros. Actualmente se exhibe en el Museo de la Catedral de la Almudena. Aprovecha para subir a la cúpula de la catedral y disfruta de unas de las mejores vistas de la parte antigua de la ciudad.

San Isidro nació en 1082 en lo que se conocía entonces como los arrabales de San Andrés. Este barrio extramuros giraba en torno a la parroquia del mismo nombre, donde hoy se custodian los restos de San Isidro y su esposa, Santa María de la Cabeza. Sería parte de lo que conocemos como La Latina, una de las zonas más castizas de Madrid, llena de calles con mucho encanto y numerosos bares y restaurantes.

El Museo de San Isidro. Los Orígenes de Madrid es un interesantísimo espacio que nos cuenta la historia de Madrid desde los primeros restos prehistóricos encontrados en nuestra ciudad hasta que se trasladó a ella la Corte en 1561… ¡Pero además es el lugar donde murió nuestro Santo! Se cree que en este solar estuvo anteriormente la casa de los Vargas (los amos de San Isidro), lugar donde vivió y murió. Por eso se la conoce también como la Casa de San Isidro. En ella podrás ver el Pozo del Milagro, donde cuenta la tradición que el Santo salvó a su hijo de morir ahogado al hacer subir el agua y permitir que el niño saliera fácilmente.

Estos días encontrarás las rosquillas del Santo. ¡Cada año por estas fechas se venden hasta 6 millones! Las hay de varios tipos: las tontas, las listas, las francesas y las de Santa Clara (y pocos saben de memoria cuál es cuál). Las encontrarás en pastelerías tradicionales como la centenaria El Riojano. Situada al comienzo de la calle Mayor, a pocos minutos del Palacio Real, fue fundada 1855 por Dámaso Maza, oriundo de La Rioja y pastelero personal de la reina María Cristina de Borbón.

En las tiendas de los alrededores de la plaza de Pontejos, muy cerca de la Puerta del Sol, encontrarás fantásticos mantones de Manila. Se usan sobre el traje típico de chulapa y los hay de diferentes colores y motivos. Algunos son verdaderas obras de arte que pueden alcanzar precios muy altos, aunque afortunadamente los hay para todos los bolsillos. Con un pañuelo y un clavel en el pelo, tu atuendo ya estará… ¡fetén! Y si eliges el traje de chulapo, este incluye pañuelo al cuello, y chaleco y gorra en el tradicional estampado de pata de gallo. La gorra se llama ‘parpusa’ y la puedes encontrar en sombrererías como las de la Plaza Mayor.

La tradición manda visitar la Ermita de San Isidro y beber del agua de su fuente el 15 de mayo, día del Santo. Entre otros milagros, a San Isidro se le atribuye haber hecho manar agua de una roca con un fuerte golpe de vara, en el mismo lugar donde hoy se encuentra la fuente santa.

Una de las tradiciones más populares del día de San Isidro es pasarlo en la pradera del mismo nombre. Allí celebran sus picnics multitud de familas y grupos de amigos que despliegan sobre la hierba sus telas repletas de comida: tortillas de patatas, pimientos asados, filetes empanados, ensaladilla rusa… Además, numerosos puestos de comida venden empanadas, bocadillos, pinchos morunos o gallinejas, uno de nuestros platos más castizos (tripas de cordero fritas). Muy cerca se instala también una feria con atracciones y un escenario para conciertos*.  

Es la bebida típica de nuestras verbenas, ¡pero ojo! Puede que no sea como tú crees. Lleva vino, además de limón, azúcar y fruta troceada (normalmente manzana). Muy, muy rica.

La tarde del 15 de mayo tiene lugar la procesión del Santo Patrón, que sale de la Colegiata de San Isidro. Sus fieles, vestidos con trajes de chulapos o goyescos, le acompañan por las calles del casco antiguo de la ciudad, aquellas en las que vivió.

Este es el lugar por excelencia de las verbenas de Madrid. Por San Isidro, es típico acudir a tomar algo en alguno de sus puestos y disfrutar de actuaciones en directo de música actual, además de exhibiciones de nuestro baile típico, el chotis, y canciones populares.

Hacemos parada en la Plaza Mayor para mostrarte todos los objetos típicos que se exponen en la tienda del Centro de Turismo. Barquillos, caramelos de violeta, parpusas, abanicos o juegos antiguos como los pitos de San Isidro. Estos silbatos de cerámica eran muy típicos antiguamente durante la celebración en la pradera de San Isidro. Los niños los llenaban de agua y con ellos hacían un sonido muy parecido al de los pájaros.

Si buscas un recuerdo de Madrid muy chulapo, este es tu sitio.

Durante las Fiestas de San Isidro, en la Plaza Mayor se instala un escenario que acoge actuaciones para todos los públicos, desde música independiente hasta zarzuela. Como no podía ser de otra manera, es muy habitual quedarse a ver del espectáculo mientras se disfuta un bocadillo de calamares de los que se venden en muchos bares y restaurantes de la plaza.

Entra en ambiente con nuestra lista de San Isidro en Spotify. Encontrarás canciones de toda la vida (¡puedes practicar tu chotis!), de esas que son muy, pero que muy castizas, o sentir Madrid al ritmo de tantas canciones que a lo largo de las últimas décadas han hablado de nuestra ciudad. ¡Viva San Isidro!

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