Compras: Chueca-Malasaña-Fuencarral
En esta área comercial de Madrid encontramos marcas de moda joven y moderna y algunos de los diseñadores noveles más relevantes, así como tiendas de tatuajes, decoración, cómics, librerías de arte o de ejemplares antiguos y de segunda mano y establecimientos de estilo retro.
Entre la plaza de Chueca y las calles Fuencarral y Hortaleza se abre un extenso mapa de pequeñas y tranquilas vías cuya actividad comercial sorprende al visitante. Epicentro del ambiente gay, el barrio se ha abierto a todo tipo de propuestas hasta convertirse en una de las zonas más visitadas tanto por los propios madrileños como por quienes vienen de fuera.
Para el público LGTBIQA+ más atrevido, sin duda Hortaleza es su calle. Aquí hay un buen número de locales en los que las prendas ceñidas son las grandes protagonistas de los escaparates. También hay gimnasios, sex-shops y librerías especializadas no sólo en temática para este colectivo –como la pionera Berkana–, sino en libro ilustrado y cómic como Panta Rhei, o en gastronomía, como A Punto Librería, espacio en el que también se imparten talleres de cocina.
Otra peculiaridad de la zona es la concentración, en torno a la calle Augusto Figueroa, de un buen número de zapaterías de muestrario, en las que es posible encontrar pares sueltos de calzado de otras temporadas a precios muy atractivos.
El principal foco de tiendas de Malasaña se sitúa en la calle Fuencarral, en el extremo este del barrio, colindante con Chueca. Esta vía, peatonal en buena parte de su recorrido en la zona, destaca por la amplísima oferta de marcas de moda, algunas de estilo deportivo – Adidas Originals, Puma, Foot Locker, Quiksilver –, y la gran mayoría de firmas consagradas en esa prenda que nunca pasa de moda: el vaquero. Levi’s, Diesel Store, Calvin Klein o Pepe Jeans son algunos ejemplos. Además, aquí podemos curiosear las últimas novedades de las tiendas Aristocrazy, Victoria's Secret, Maje, Adolfo Domínguez, Guess, Tezenis, Calzedonia, Maje, Ese o Ese, Desigual y El Ganso, entre otras.
En este barrio, uno de los más alternativos de la ciudad, se descubren propuestas de vestimenta más propia de grupos urbanos; establecimientos de tatuajes; y tiendas de estilo retro que venden todo tipo de artículos de décadas pasadas (la de 1960, la de 1970, la de 1980...), nuevos u originales de aquella época, como El Templo de Susu, Popland o la boutique de 0 a 6 años Mon Petit Retro, por citar solo algunos ejemplos. También abundan en la zona tiendas de cómics, como Generación X, Madrid Cómics, Elektra Cómic, Crisis Cómics, Otaku Center o Viñetas.
Malasaña fue el punto neurálgico de la famosa Movida madrileña en la década de 1980 y esa revolución estilística que protagonizaron escritores, músicos y artistas en general de aquel momento también perdura en esta área donde abundan los negocios donde es posible hacerse con una cazadora de cuero de aquellos míticos años.
Por lo que respecta los comercios centenarios cabe mencionar espacios como la Antigua Casa Crespo, un auténtico templo de la alpargata –calzado muy utilizado en España en los meses de calor– artesanal o el taller del Luthier Fernando Solar.
Ubicado muy cerca de Malasaña, se sitúa el Triángulo de Ballesta (Triball), delimitado por las calles Ballesta, Valverde, Desengaño, Corredera Baja de San Pablo, Barco y Plaza Soledad Torres Acosta (apodada 'plaza de la Luna'), formando así una zona triangular que da nombre al eje. Un barrio emergente, que en los últimos tiempos ha resurgido con un gran impulso cultural y social.
Aquí junto a la ropa de Deffort, Kling o Monkey Garden, podemos adquirir los tocados para ocasiones especiales de Carlos Castro o los vestidos de novia a medida de Miguel Crespí. También cabe destacar la tienda de ropa, decoración y complementos Eduardo Rivera, la tienda Colour Nude la popular marca de calcetines Jimmy Lion.
Compras gastro
En este eje comercial encontramos una amplia oferta de mercados gastronómicos donde es posible comprar productos locales, además de tapear. El Mercado de Barceló – con diferentes terrazas al aire libre -, el de San Ildefonso – con varios puestos de comida internacional – el de San Antón – especializado en platos y alimentos orgánicos – marcan este sabroso recorrido.
A los golosos, señalamos asimismo, la pastelería Celicioso (gluten free) y las dos tiendas de Horno San Onofre – muy célebre por su Roscón de Reyes -. Además, con más de 30 años de experiencia en Malasaña se encuentra la Pastelería Diadema con especialidades que incluyen roscones, tarta de zanahoria, croissants e incluso empanadillas.
Y si quieres acompañar estos momentos dulces de un café o de una buena lectura, puedes visitar las librerías Tipos Infames o Cervantes y compañía, entre otras.
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