Este edificio es obra de el japonés Arta Isozaki, arquitecto con numerosos premios internacionales, entre ellos, un premio Pritzker. Su propuesta para la Avenida de los Poblados -un paseo que discurre en párelo a la M-40 entre los distritos de Carbanchel y Latina- es este biombo recubierto por una serie de paralelogramas grises que siguen la sucesión del matemático del siglo XIII Fibonacci. La obra es otro encargo de la EMVS y se inauguró en el año 2013. Quien se acerque a verlo debe fijarse en los ángulos del edificio: ¡ninguna es un ángulo recto! Los volúmenes entrantes y salientes hacen que cambia de manera muy significativa a lo largo del día y que las viviendas tengan una relación muy especial con los espacios que quedan vacíos. Supone una alternativa muy expresiva al bloque convencional de los barrios residenciales de la ciudad.