Un acogedor establecimiento de elegante aire retro, que consigue la atmósfera perfecta para disfrutar de una exótica carta. En ella encontramos especialidades mediterráneas como el cuscús o tempura de langostinos.

Ginger es el local de una cadena que apuesta por cuidar al máximo la decoración, los detalles, la comida y, sobre todo, los precios. Situado en pleno centro de Madrid, es un espacio elegante y cuidado, con grandes ventanales a la calle y una decoración con estilo en la que predominan los espejos y en donde los manteles y las servilletas son de tela. Los precios son imbatibles y la comida es imaginativa y de calidad. En la carta hay un poco de todo, tanto carnes como pescados y pasta.