En sus dos plantas de 370 metros cuadrados en el barrio de Salamanca, la diseñadora Stella McCartney, imprime su personal sello y visión de la moda, no sólo a través de su ropa sino también en el ambiente que se respira en la tienda. Estantes de mármol, instalaciones de latón, aires de “pop art”, todo ello para enmarcar las colecciones de Stella. Pret-à-porter, denim, niños, zapatos y gafas de sol. La diseñadora tiene una rica producción que muestra en ésta su segunda tienda en España, después de inaugurar la de Barcelona.

El mármol es el material elegido para que impregne toda la tienda a través de esculturas, estantes y otros soportes que van dando al espacio un aire intimista y moderno, dos características en la línea de la hija del famoso cantante de The Beatles, Paul McCartney.

Tiendas que se unen a las más de 33 que tiene repartidas por el mundo, sobre todo, en las principales capitales de la moda mundial. La marca Stella McCartney forma parte del entramado dedicado al lujo Kering, propietario además de otras marcas exclusivas como Gucci, Bottega Veneta y Saint Laurent París.