Sus creaciones, que incluyen también accesorios y complementos como bolsos de todos los formatos, maletas o gafas, condensan una elegancia innata combinada con un fuerte sentido de la funcionalidad, ya sea en sus líneas más formales o en la más desenfadada PG Sport.

Los establecimientos de la capital –dos en la calle Serrano y otro en el Centro Comercial Moda Shopping de General Perón- no son más que un reflejo de la estética minimalista de sus colecciones: a lo largo de un esbelto pasillo se reparten las últimas propuestas exhibidas en las pasarelas, resaltadas por misteriosos juegos de luces que recrean un ambiente neblinoso; la sensación de amplio espacio se multiplica en espejos que muestran un mobiliario que fusiona la madera de ébano con la piedra.

La preocupación por un cuidado interiorismo es también seña de identidad de sus propuestas para el hogar, ideadas no para amueblar, sino para decorar, desde sábanas y fundas nórdicas hasta otros detalles como velas y cojines.